Gracias a este tratamiento es posible luchar contra la flacidez, sin pasar por el quirófano. Son un procedimiento aconsejable para mujeres y hombres que presentan los primeros síntomas de envejecimiento. Para aquellos que quieren reducir el impacto de las primeras arrugas o de los surcos demasiado marcados. Es una técnica de rejuvenecimiento que no funciona en pieles muy maduras, con arrugas demasiado marcadas y una flacidez extrema.
¿Qué son los hilos tensores?
Son filamentos del grosor de un cabello de diferentes materiales pero todos biocompatibles, por lo que no producen alergias ni rechazo. Los más utilizados en estética son los hilos de polidioxanona, un material reabsorbible y compatible con el organismo.
¿Cómo se colocan?
Se colocan a nivel dérmico mediante una aguja muy fina. Una vez posicionado el hilo, la aguja se retira y el hilo queda fijado en la zona deseada. Los hilos mágicos no precisan anclaje ni sutura, por lo que su colocación es rápida. La colocación se realiza sin anestesia o con anestesia local y suele durar entre 20 y 30 minutos. No es dolorosa para el paciente y no es necesaria la hospitalización. Los posibles efectos secundarios son inflamación y algún pequeño hematoma que desaparece a la semana.
¿Cuánto tiempo dura su efecto?
Sus resultados son, por una parte, inmediatos, ya que producen una tensión con efecto lifting, y por otra, progresivos. Aproximadamente 3 meses después de su implantación se alcanza el resultado deseado. Y aunque el cuerpo reabsorbe los hilos a los 6-8 meses, sus efectos se mantienen entre 12 y 18 meses.
Pide tu cita con la Dra. Noemí Soriano y ella te aconsejará si este tratamientos se adapta a tus necesidades.